El valor del agua

VILLA OCAMPO – COTELVO SERVICIOS – El 70% de la superficie del planeta tierra está compuesto por agua y sólo el 2,50% es dulce, o sea apta para el consumo humano; en tanto, el 40% de la población mundial sufre escasez de agua.El manejo del agua juega un papel integrador de otros muchos recursos, como el suelo, la conservación de la diversidad biológica y la seguridad de la población. Por esta razón, el agua constituye un recurso por el cual todos compiten, originándose conflictos que deben ser superados.

Todas las actividades humanas utilizan el agua:
– 5% para uso domiciliario
– 10% para uso industrial
– 85% para uso agropecuario

En muchas ocasiones la desperdician o la devuelven contaminadas, lo que afecta a estas mismas actividades, a la salud humana y a todos los demás seres vivos. Cada sector, cada actividad la usa de manera diversa y muchas veces no lo hacen responsable.

El consumo del agua debe ser responsabilidad de todos, más allá de la acción específica de entes encargados de su distribución; para ello es preciso definir y poner en marcha estrategias participativas que involucren a todos y cada uno de los miembros de la comunidad organizada.
– Barrido y limpieza de veredas con agua: 32 litros
– Uso de lavarropas en dos lavadas: 140 litros
– Lavado de autos en 8 minutos: 32 litros
– Canilla goteando las 24 horas: 46 litros
– Riego de jardín durante una hora: 240 litros

Desafortunadamente no se ejerce en la actualidad una conducta respetuosa del consumo del recurso, que en los próximos años será el centro de atención de varias naciones del mundo, debido a su escasez. Agua y derroche van de la mano.

Esta situación debe revertirse a corto plazo y sólo esto es posible si se educa a la población correctamente sobre el uso y el consumo del agua, mentalizando a todos los ciudadanos acerca de la prioritaria necesidad de aprovechamiento externo del recurso.

Existe una errada tendencia a creer que esta situación en algunos casos alarmantes, es exagerada; lo cierto es que el mundo está escaso de agua apta para el consumo y la limitada cantidad aprovechable muchas veces se desperdicia por falta de atención, excesivo e inútil o simplemente descuido; prueba de ellos es el uso del agua para el consumo domiciliario.

Tomemos el ejemplo del consumo de las tareas diarias dentro del baño de nuestra casa:
– Ducha (15 minutos): 60 litros
– Lavado de manos (55 segundos): 3,5 litros
– Lavado de dientes (55 segundos): 3,5 litros
– Uso del inodoro (5 segundos): 19 litros
– Baño de inmersión: 350 litros

La toma de conciencia es indispensable, porque nos permitirá modificar muchos de nuestros hábitos, tan nocivos para el aprovechamiento del recurso. En primer lugar, simples acciones frente a nuestros malos hábitos pueden reducir considerablemente el problema; si por ejemplo, evitamos utilizar el inodoro como basurero, arrojando colillas, algodones u otros desperdicios en él, podríamos reducir en gran medida el derroche de agua a través de este sanitario.

También si al lavarnos los dientes, las manos, o al afeitarnos, cerráramos la canilla cuando no la estamos usando directamente, al igual que en el riego del jardín o la vereda, ahorraríamos una gran cantidad de litros de agua por vez. Con estas acciones, el recurso aumenta sus posibilidades de permanencia óptima en nuestra vida y además también habrá mayor presión de agua en nuestro sistema sanitario, puesto que el consumo bajaría a casi la mitad de litros que hoy son utilizados para efectuar las mismas tareas domiciliarias.