Siguen las quemas y el río Paraná muestra una bajante extrema

La imagen satelital de los focos tomada este miércoles por El Paraná no se toca.

El otoño de este año trajo consigo un panorama preocupante que no cambió un ápice sobre la crisis ecológica que vive el humedal, entre un caudal del río de menos de un metro y el regreso de los focos ígneos en las mismas zonas, donde al parecer no es suficiente el control acordado por todos los niveles del Estado. A la vez que el Congreso no tiene en vistas debatir la Ley de Humedales.

En diálogo con Ariel Bulsicco en Sí 98.9, Pablo Cantador de la organización El Paraná no se toca aseguró que “con la pandemia la mirada está puesta en otro lado, y siempre hay alguien que aprovecha para sacar una tajada a su favor”, mientras la Ley de Humedales que tuvo dictamen favorable para que se debata en el Congreso de la Nación, “quedó en un cajón, bien guardadita”.

Según precisó, no se observa nada diferente al año pasado en la prevención, “no escuchamos que hayan detenido a nadie de los que están incendiando. Asumimos que son los mismos del año pasado, porque estuvimos levantando las imágenes satelitales para ver dónde se estaba prendiendo y es en los mismos sectores, que son el Arroyo Barrancoso, el Paranacito, Los Toldos, a más de 40 kilómetros isla adentro”.

Es por eso que el propio ecologista lanzó: “Esto parece un deja vu del 2020. El río lamentablemente está ahora en bajante, y ayer se podían ver las columnas de humo nuevamente. Ya están quemando los pastos que se empiezan a secar por el otoño”.

A esto se suma la realidad de la fauna, que describió: “Cuando transito el humedal es muy poca la fauna que quedó, hay muchas lagunitas donde se veian nutrias y eso desapareció. Había aves caracoleros, que es un gavilán, ya no se ven. Es impactante el cambio”.

La bajante había subido en febrero a 2,80 metros, pero “no alcanzó para llenar lagunas o que ingrese agua al humedal y duró muy poco. En marzo el río comenzó a bajar nuevamente y bueno, hoy estamos en menos de un metro. A esta altura del año mayo todos los años anteriores a 2019, siempre el río estaba a 3 o 4 metros de altura, es lo usual. Hoy no llega al metro, y sigue en baja”.

Al ser consultado sobre las causas de la bajante del río, Cantador analizó: “no lo que ve en informes es que no llueve en la cuenca alta, en el sur de Brasil y Paraguay. Hay una crisis hídrica, más la deforestación que hay en Brasil y en Paraguay. No es solo acá que se está quemando y desmontando, y todo eso impacta”.

Fuente: rosarioplus.com