El pollo inductivista

RECONQUISTA – NOTA DE OPINION – Es obvio que si se nos pregunta porque creemos que el sol saldrá mañana contestaremos naturalmente: “porque ha salido invariablemente todos los días”. Tenemos la firme creencia de que saldrá en el futuro porque ha salido en el pasado. Por Ing. Fernando Zanier.Bertrand Russell daba un ejemplo sobre el problema del conocimiento inductivo. Planteaba el ejemplo de un pollo en un criadero, aquél que creía que “de los mismos antecedentes se siguen las mismas consecuencias”.

Nuestro pollo lógicamente concluía que los humanos que lo rodeaban estaban a su servicio. Su confianza aumentaba día tras día, al recibir más y más comida, sin imaginar que la misma mano que lo alimentaba sería la que le retorcería el pescuezo. Pese a que su sacrificio era inminente, cada vez se sentía más seguro. Y, no tan paradójicamente, su sensación de seguridad alcanzó su punto máximo cuando el riesgo era el mayor. Hasta que un día sucedió algo inesperado para el pollo, aunque no para su carnicero.

No sólo el pollo no pudo prever su trágico final: E.J. Smith, capitán del Titanic, escribió en 1907, cinco años antes del más famoso naufragio de la historia: “Con toda mi experiencia, nunca me he encontrado un accidente que sea digno de mención. En todos mis años en el mar, nunca vi ningún naufragio y jamás he encontrado una situación que amenazara con acabar en algún desastre”.

Quizá a nosotros como sociedad nos sucede lo mismo que al pollo de Bertrand Russell, esta avalancha de populismo y dadivas no nos permiten distinguir la repartija de los recursos de el verdadero progreso. La recaudación puede utilizarse para infraestructura, que en el ámbito nacional puede interpretarse como escuelas, hospitales, rutas, autopistas, y en el ámbito municipal como pavimentado calles, alumbrado público, trazado de un sistema de desagües, informatización de los tramites municipales, etc. Claro que si uno mira en el corto plazo y le dan a elegir entre recibir plata ya o que el gobierno asfalte una calle, prefiere lo inmediato, pero eso es una espiral decadente que termina con sociedades devastadas, y del cual cuesta mucho salir. El asistencialismo debe ser solo un parche mientras se crean las fuentes de trabajo y se dan las condiciones propicias para la inversión, para que la gente pueda tener trabajo y deje de depender del gobernante de turno, sea cual fuere su signo político, es hora de salir de esa espiral inductivista de la dadiva para pasar a la del desarrollo y crecimiento de las sociedades.

Ing. Fernando Zanier