PROVINCIALES – Así lo advirtió el senador Rubén Giustiniani al solicitar la modificación del régimen de distribución de los recursos generados por la Ley Nacional a los Débitos y Créditos Bancarios. Con el actual esquema, la provincia de Santa Fe recibe cerca de 320 millones de pesos anuales.El proyecto presentado por el senador nacional socialista, Rubén Giustiniani, solicita que “el total de lo recaudado por el impuesto establecido según el artículo 1° de la Ley 25.413 sobre los créditos y débitos y demás movimientos” sea distribuido “entre la Nación y el conjunto de las provincias conforme a las disposiciones de los artículo 3° y 4° de la ley 23.548” sobre Coparticipación Federal de Recursos Fiscales.
Esto significa que sea coparticipado el 100 por ciento de lo recaudado de acuerdo a lo establecido en la normativa: 42,34% para la Nación y 54,66% para las Provincias. De este modo, las provincias de Santa Fe y Córdoba recibirían anualmente una cifra estimativa de 600 millones de pesos adicionales cada una y la provincia de Buenos Aires aproximadamente $ 1.400 millones de pesos. Esto implica que la provincia de Santa Fe pasaría a recibir cerca de mil millones de pesos anuales por el impuesto al cheque.
Actualmente, la Nación se queda con el 70 por ciento del llamado “Impuesto al Cheque” y sólo coparticipa a las provincias el 30 por ciento de lo recaudado, pero de esa masa de dinero sólo el 14.5 % llega a las provincias.
“La distribución de recursos financieros públicos entre la Nación y las Provincias es un aspecto central que apuntala la vigencia de un régimen federal de gobierno. De su definición y forma de implementación depende en gran parte el ejercicio efectivo de la autonomía por parte de las provincias”, señaló Giustiniani tras recordar que esta iniciativa parlamentaria se suma a la petición realizada la semana pasada ante la Corte Suprema de Justicia de la Nación bajo la figura “Amigos del Tribunal” para que se cumpla con la distribución de los fondos nacionales.
La Ley a los Débitos y Créditos Bancarios entró en vigencia en el año 2001. Se trata del cuarto impuesto nacional en nivel de importancia en materia de recaudación.
Prensa Giustiniani