El Ministerio de Salud realizó una jornada de asesoramiento genético en oncología

El Ministerio de Salud, a través del subprograma de Prevención de Cáncer de Cuello Uterino, realizó este viernes en la ciudad de Santa Fe una jornada de asesoramiento en oncología destinada a equipos del primer y segundo nivel de atención, en la que se ahondó sobre la importancia de los estudios genéticos para la prevención y el tratamiento del cáncer.







La subdirectora de Promoción de la Salud y Control de Enfermedades Crónicas No Trasmisibles, Patricia Morales, indicó que “entre 20 y 30 % de los casos nuevos de cáncer diagnosticado anualmente ocurren en familias con predisposición mayor que la población general y entre 5 y un 10 % de todos los casos corresponden a algún síndrome de cáncer hereditario y los riesgos de desarrollar la enfermedad son altos”, por lo que es importante “el estudio genético en las estrategias públicas de prevención y promoción”.

Morales señaló que los estudios genéticos son fundamentales “para evaluar los riesgos, prevenir el alto riesgo, definir las conductas adecuadas, detectar de forma precoz e informar y contener al individuo y sus familiares”.



Explicó, además, que “la evaluación de riesgos genéticos implica considerar la historia familiar y personal, los cálculos empíricos (posibilidad de desarrollar cáncer y/o de portar la mutación) y por último, realizar estudios moleculares cuando sea necesario y posible”.

La funcionaria puso de manifiesto que ubicar a una persona o familia en un rango de riesgo determinado permite “definir conductas adecuadas y racionalizar los recursos en controles y seguimiento oportuno, así como poder diagnosticar y tratar tempranamente aquellos cánceres detectados. Del mismo modo, se pueden “planificar conductas preventivas para cada paciente”.

PREVENCIÓN PRIMARIA Y TRATAMIENTO ESPECÍFICO

Gonzalo Tabares, ginecólogo-mastólogo de la sección de Patología Mamaria del hospital Centenario de Rosario, enfatizó que “la posibilidad de llevar a cabo estrategias preventivas tiene un impacto claro sobre la mortalidad de estos grupos, conformando así un contexto en el que el abordaje adecuado de los cánceres hereditarios es necesario e incuestionable”.

“Por eso es que, además del asesoramiento genético en oncología -tanto en las políticas de prevención primaria como en las estrategias de reducción de riesgo, tratamiento y seguimiento- se intenta dar un mayor lugar en el ámbito del Ministerio de Salud y dentro del plan provincial de Control de Cáncer, a fin de sumarse al registro nacional de enfermedades hereditarias y familiares, y lograr un diagnóstico de situación de la población”, resaltó.

Además, el profesional destacó que hay dos tipos de conducta en las personas cuyos familiares tuvieron cáncer y que se insta a los equipos de salud a estar atentos a ellas: “Por un lado, hay pacientes que subvaloran el riesgo y no se hacen chequeos preventivos y otros que los sobrevaloran y piden tratamientos radicales por miedo a sufrir lo que sus antepasados. Esto se ve mucho en antecedentes de patología de mama”, describió.

Por eso, mencionó que “cuando el riesgo es alto, se utilizan métodos genéticos para determinar si la persona es portadora de la mutación genética predisponente o no y esto nos permite saber el riesgo real, por un lado, y por otro, si ya existe el tumor, el estudio genético nos indica qué medicamento utilizar específicamente en esos casos”, concluyó Tabares.

TEMARIO

La jornada, que se realizó en el salón Dorado del exhospital Italiano, comenzó con la presentación a cargo de Morales y el responsable del programa provincial de Cáncer Luis Fein, luego de lo cual expuso el subcoordinador del programa nacional de Cáncer Familiar y Hereditario del Instituto Nacional de Cáncer (INC), Pablo Kalfayan, sobre el asesoramiento genético en oncología, su utilidad e impacto en la práctica.

Posteriormente tuvieron lugar las disertaciones sobre “Realización de test genéticos”, a cargo de Sergio Lecuona, y sobre “Cáncer de mama hereditario”, por Gonzalo Tabares, continuando con la charla de Lina Núñez, denominada “Valor consulta genética en colon”.

Las reflexiones finales -y a modo de cierre- se desarrollaron tras una propuesta de circuitos de atención en la provincia expuesta por Karina Zanini y luego de un espacio de intercambio con formulación de preguntas.