NACIONALES – NOTA DE OPINION – Las familias prefieren los destinos nacionales para pasar sus días en contacto con la naturaleza. Por Ariel Robledo.Este 2011 ha comenzado de excelente manera para el turismo nacional, ya que en los centros más importantes del país la ocupación en algunos casos ha superado el 70%, mientras que en otros destinos, durante enero, la ocupación fue total.
En el litoral las expectativas fueron cubiertas ampliamente, especialmente en aquellos puntos en donde el turista encuentra playas o bien complejos que posean piscina, un elemento fundamental para aplacar los calores de la temporada estival.
Esta situación empuja a los inversores a apostar por rincones que antes no eran tenidos en cuenta como destinos para recibir visitantes y, como muchas veces destacamos, siempre hay alguien interesado en conocer nuevas alternativas turísticas, y por lo tanto cada región posee un atractivo singular que seducirá a personas de otras latitudes.
Es muy favorable la situación para cabañas, complejos, hoteles y prestadores de servicios, esto moviliza las economías regionales y genera puestos de trabajo en muchas localidades en donde falta este recurso económico.
Debemos tener presente que hoy las familias ya no se pueden tomarse 20 días de vacaciones corridas, por un montón de cuestiones, ya sean laborales, de seguridad, etc. Esto favorece las visitas de una semana, o unas mini vacaciones, distribuidas durante el año, por lo que durante los 12 meses, siempre hay una chance de recibir a los turistas, un panorama más que alentador para quienes se han decidido a invertir en el negocio turístico. Además, según estudios, el ecoturismo crece anualmente a un promedio del 10 al 25 %, un número muy bueno que nos garantiza la presencia de visitantes en diferentes épocas y en distintos rincones del país.
Desde ya, apoyamos este movimiento de turistas en nuestras regiones, y seguramente encontrarán nuevos y seductores puntos para disfrutar de unos días en pleno contacto con los ambientes naturales. Esperamos que así sea, y que más personas practiquen el turismo familiar y con amigos.
Ariel Robledo – Revista El Pato
