Salvador Distefano: «El dólar Mauricio y el dólar Alberto»

Salvador Di Stefano Asesor en Negocios, Económico y Financiero

¿Con quién ganan más dinero los mercados? ¿Con el candidato que les ofrezca más apertura, volumen de negocios y transparencia, o con quienes propongan cepo, Indec trucho, intervención y economía cerrada? En esta nota ponemos los números si gana Mauricio o si gana Alberto.

Las elecciones traerán consigo un cambio brutal en las políticas monetarias a llevarse adelante. Trataremos de descifrar lo que podría ocurrir a futuro si gana Mauricio o si gana Alberto.

¿Qué sucede si gana Alberto?
Bajo la actual coyuntura, la oposición pide a gritos que se cuiden las reservas y que paren el drenaje de dólares al exterior. En el año 2012 el gobierno de Cristina Fernandez de Kirchner instauró un cepo a la compra de dólares. Al decir del candidato, no salen, pero tampoco ingresan dólares del exterior.

Dicha política fue poco efectiva, en diciembre de 2011 las reservas ascendían a U$S 46.376 millones, mientras que a diciembre de 2015 se ubicaban en U$S 25.563 millones. Parece que el cepo generó pocos resultados efectivos para contener la fuga, sin embargo, el candidato lo propone como una solución parcial a la salida de divisas.

Justamente, en el año 2011, la propuesta de cepo era transitoria y duró hasta el final del mandato, inclusive el candidato a presidente Daniel Scioli no proponía salir del cepo, es más, auguraban para dicha liberación, una transición sin fecha de salida estipulada.

La balanza comercial argentina al año 2012 era positiva en U$S 12.419 millones, en el año 2013 bajó a U$S 8.000 millones, en el año 2014 bajó a U$S 3.108 millones y en el año 2015 se logró un déficit de U$S 2.970 millones. Claramente el cepo no sirvió para mucho, ya que el comercio exterior pasó de un gran positivo, a un significativo resultado negativo.

La economía argentina había crecido el 6,0% en el año 2011, para el año 2012 cayó el 1%, creció en el año 2013 el 2,4%, en el año 2014 cayó el 2,5% y en el año 2015 creció el 2,7%. Pasamos de una suba considerable a crecimientos enanos.

Entre los años 2011 y 2015 el dólar oficial cotizó en un promedio de $ 6,95, mientras que el dólar blue, informal o paralelo cotizó en $ 10,58, lo que implica que hubo una brecha promedio del 52,3% en los 4 años.

Los pronósticos del Relevamiento de Expectativa de Mercado dan cuenta de un dólar para fin de año en $ 51,00, sin embargo, el límite de la banda de intervención está fijado en $ 51,50. Suponiendo que el dólar a fin de año quede en el límite de la banda de intervención y gana la fórmula Fernandez-Fernandez e instauran el cepo, el dólar blue podría cotizar en torno de $ 78,43.

Parece muy loco lo que vamos a plantear, pero en la época de los teléfonos Smartphone, comprar dólar blue que hoy cotiza en $ 44,00 ponerlo en un cofre y esperar que gane Alberto y Cristina te puede dejar una utilidad del 78,25% en menos de 6 meses.

¿Qué sucede si gana Mauricio?
Es muy probable que el Fondo Monetario Internacional le otorgue al gobierno un Crédito de Facilidades Extendidas, lo que implicaría una renovación automática de los créditos actuales a plazos más largos y metas cualitativas a cumplir, como serían la reforma laboral, previsional e impositiva. Esto generaría una abundancia de dólares e inversiones que recibiría el país y, por lo tanto, no tendría mucho sentido ahorrar en dólares.

Cuando Mauricio Macri asumió la presidencia, las reservas eran de U$S 25.563 millones, de dicho total los encajes eran U$S 11.167 millones, el crédito chino ascendía a U$S 13.958 millones y en caja tenían U$S 390 millones, las reservas reales disponibles eran U$S 48 millones.

Al mes de junio de 2019 las reservas suman U$S 64.278 millones, los encajes U$S 15.661 millones, el crédito chino y del BIS suman U$S 24.218 millones, en caja U$S 9.884 millones (crédito del FMI) y las reservas reales suman U$S 14.515 millones.

Las reservas son escasas, pero eran mucho más escasas bajo el tridente ofensivo Cristina, Kicillof y Vanoli. Mauricio, Dujovne y Sandleris no hacen muchos goles, pero juntan más dólares en las reservas.

La balanza comercial argentina en el año 2016 fue positiva en U$S 1.968 millones, en el año 2017 negativa en U$S 8.308 millones, en el año 2018 negativa en U$S 3.823 millones, y en 5 meses del año 2019 es positiva en U$S 4.527 millones. El mayor valor del dólar en los últimos meses ayudó al cambio de tendencia momentáneamente.

La economía argentina en el año 2016 bajó el 1,6%, en el año 2017 creció el 2,4% y en el año 2018 cayó el 2,5%. Así no salimos de pobres.

El gobierno de Mauricio se divide en dos etapas.1) mientras tuvo crédito externo pudo hacer gradualismo y ganó las elecciones de mitad de mandato, 2) cuando se cortó el crédito externo llevó adelante el ajuste más grande de la historia, reduciendo el déficit primario en U$S 22.309 millones comparado con el año 2015.

Entre el año 2016 y la actualidad el dólar cotizó en promedio en $ 23,40, mientras que el dólar blue, informal o paralelo en igual periodo de tiempo cotizó a $ 24,15, lo que implicó una brecha del 4,7% entre ambas cotizaciones.

El que pudo comprar dólares oficiales en noviembre de 2015 los obtuvo a una cotización de $ 9,68, comparado con el dólar actual de $ 42,45 tenés una diferencia de 338,5%. Debemos dejar en claro que poca gente podía comprar dólar oficial, y cuando lo hacía eran sumas muy pequeñas.

Los que compraron dólar blue a noviembre de 2015 lo hicieron a $ 15,10, comparado con una cotización del blue de hoy de $ 44,00, tenes una diferencia del 191,4%. No fue un gran negocio.

Conclusiones
No fue negocio comprar dólar blue bajo la administración de Cristina, ya que la brecha con el oficial se achicó demasiado en la administración de Mauricio, y la suba del dólar no compensó el mayor valor pagado antes del año 2016.

Si en las próximas elecciones gana la fórmula Fernandez Fernandez la compra de dólar blue puede dar un gran beneficio, ya que, al momento de instaurarse la restricción a la compra de dólares, la brecha entre el oficial y el blue le dejará grandes utilidades a los que tengan dólar blue.

Si gana la fórmula Macri-Pichetto es muy probable que la abundancia de crédito externo y un programa monetario parecido a la convertibilidad anclen el tipo de cambio y se generen utilidades importantes en pesos.

En resumen, parece que el mix de inversiones apropiados para enfrentar el proceso electoral, pasa por tener una proporción de dólares blue y pesos para proteger los ahorros según gane uno u otro candidato.

Si gana la oposición voy a adquirir bonos en dólares de largo plazo, ya que podría sobrevenir una reestructuración de deuda que postergaría el pago de los bonos más cortos, dicho impacto no repercutiría en los bonos de largo plazo.

No hay que comprar bonos que ajustan por inflación, porque ya en una oportunidad mintieron con el Indec, y podría volver a ocurrir. Los bonos en pesos a tasa variable, no serían recomendables.

Si gana el oficialismo, como tendrá acceso a financiamiento, pagará la deuda, y los bonos en dólares largos tendrán una gran suba en paridad.

Los bonos en pesos que ajustan por inflación serían muy atractivos ya que el Indec hoy no miente, al igual que los bonos en pesos a tasa variable, ya que el peso se podría apreciar y las paridades de los bonos en pesos tendrían una suba considerable.

Si gana la oposición las acciones serán un fiasco, y si gana el oficialismo podrían subir un 100% como mínimo.

En resumen, el mercado sube porque apoya al candidato que no interviene en los mercados y genera riqueza, mientras que, si gana el Kirchnerismo, tenemos asegurado intervención, menos volumen de negocios, precios más bajos, y volvemos al deporte nacional más popular, comprar dólares en una cueva y esconderlos en un cofre.

Salvador Di Stefano
Asesor en Negocios, Económico y Financiero tanto de empresas de la ciudad y la región; como de individuos y empresas familiares ligadas al comercio, industria y campo.